La fotoprotección es la actividad preventiva y terapéutica frente a los daños que puede causar la radiación UV, como lo son el cáncer de piel y el foto envejecimiento.
Fue a partir de los años 30 cuando se comenzó a tener conciencia de estos efectos, y aparecieron en el mercado los primeros fotoprotectores tópicos, cuya función es evitar el paso de la radiación UV a través de nuestra piel.
Estos se dividen en químicos y minerales. Los fotoprotectores químicos actúan absorbiendo la energía de la radiación UV y liberándola en otras formas de energía como lo son el calor, la fluorescencia y la transferencia a moléculas adyacentes. Los minerales actúan como una barrera física reflejando y dispersando la radiación que llega a la piel. En algunos de ellos podemos encontrar también antioxidantes que aumentan su eficacia y seguridad. Las presentaciones mas comunes son en crema, spray, gel, emulsión, barra, compacto, con o sin color.
-¿Cuándo lo debo aplicar? Siempre que haya luz de día, incluso en días nublados o estando bajo la sombra, al menos 30 minutos antes de la exposición.
-¿Cuánta cantidad se debe aplicar? Para la piel del rostro, la cantidad adecuada son dos líneas extendidas en dos dedos. En cuanto al cuerpo, un truco orientativo para saber cuánto producto echarse es usar el equivalente de dos cucharadas (unos 30 ml) para toda la piel que se vaya a exponer al sol.
-¿Cada cuánto lo debo re aplicar? Al menos cada 4 horas, si es resistente al agua y estamos en la alberca o en el mar es necesario re aplicar cada hora.
Existe también la fotoprotección sistémica, que consiste en la ingestión por vía oral de sustancias que protegen la piel en su totalidad y poseen propiedades antioxidantes, anti inflamatorias y/o inmunomoduladoras, siendo un complemento ideal para la foto protección tópica.
Otras formas de foto protección son el uso de prendas y accesorios (sombreros, mangas solares, sombrillas) que nos cubran de la radiación UV. Los tejidos, como el nailon o el poliéster, especialmente de doble punto, y los colores oscuros, aumentan los niveles de protección.
Antes de escoger el protector adecuado, debemos tomar en cuenta que no todas las pieles son iguales, por lo que siempre es recomendable acudir con un profesional para asesorarnos y elegir la mejor opción de acuerdo a las necesidades de nuestra piel, para mantenerla sana y bella ✨.